30 octubre 2007

Socialismo y Xenofobia siglo XXI


La revolución chavista, al parecer, lejos de resolver los males pasados, lo que ha logrado es sembar los que no existían hasta hace muy poco, prueba de ellos son las muestras de xenofobia como las que recogen las siguientes imágenes.

La duda que me asalta es si esto es un caso aislado o, por el contrario, la norma.

Desconozco el origen de las imágenes y las circunstancias en las que fueron tomadas las fotos pero aun así no deja de ser inquietante.

Creo que viene a cuento unas frases de Bolívar que Carlos Rangel cita en los primeros párrafos de su libro "Del buen Salvaje al buen revolucionario":

"He mandado veinte años y de ellos no he sacado más que pocos resultados ciertos: 1, La América (Latina) es ingobernable para nosotros; 2, el que sirve una revolución ara en el mar; 3, la única cosa que se puede hacer en América (Latina) es emigrar; 4, este país (la Gran Colombia, luego fragmentada entre Colombia, Venezuela y Ecuador) caerá infaliblemente en manos de la multitud desenfrenada para después pasar a tiranuelos casi imperceptibles de todos los colores y razas; 5, devorados por todos los crímenes y extinguidos por la ferocidad, los europeos no se dignarán conquistarnos, 6, si fuera posible que una parte del mundo volviera al caos primitivo, éste sería el último período de la América (Latina)." Simón Bolívar.

La pancarta dice:

Hijos de inmigrantes de mierda
fuera de la patria de Bolívar,
sus malditas raices están en Europa,
basuras son.

Como suelen decir los gringos: "si uno no sabe adónde va, acaba por llegar al lugar equivocado"

CARLOS RANGEL: Del Buen Salvaje al Buen Revolucionario (Entrevista a Marcel Granier)

26 octubre 2007

Un poco de música

West Side history (Leonard Bernstain) (Parte I):


Parte II:



Esta pieza es de Oscar Lorenzo Fernandez, Brasil (1897-1948) Es el tercer movimiento de su suite "Reisado do Pastoreio":Dirige Dudamel

West Side history (En Londres)


gtltornt9
Uploaded by gtltornt


Danzón Nº 2:

11 octubre 2007

Ayn Rand (1.905 - 1.982)

Sobre la religión:


La Rebelión de Atlas


La Virtud del Egoismo


1905 - 1982

De cada cual según su capacidad; a cada cual según sus necesidades

En Liberalismo.org han trasncrito una serie de fragmentos de la novela de Ayn Rand "La Rebelión de Atlas". Descorazonador relato que no deben dejar de leer todos aquellos que creen en el Socialismo del siglo XXI.

"¿Para qué habríamos de desear trabajar? ¿Por amor a nuestros hermanos? ¿Qué hermanos? ¿Para los aprovechadores, los sinvergüenzas, los holgazanes que veíamos a nuestro alrededor? Si eran simuladores o incompetentes, si no querían trabajar o estaban incapacitados para hacerlo, ¿qué nos importaba a nosotros? Si quedábamos reducidos para toda la vida al nivel de su capacidad, fingida o real, ¿para qué preocuparnos? No teníamos manera de saber cuáles eran sus verdaderas condiciones, carecíamos de medios para controlar sus necesidades. Lo único que se sabía era que estábamos convertidos en bestias de carga, luchando ciegamente, en un lugar que era mitad hospital, mitad almacén, sin marchar hacia ningún objetivo, excepto la incompetencia, el desastre y las enfermedades. Éramos bestias colocadas allí como instrumentos de aquél que quisiera satisfacer las necesidades de otro.

"¿Amor fraternal? Fue allí cuando aprendimos a aborrecer a nuestros hermanos por primera vez en la vida. Los odiábamos por todas las comidas que ingerían, por los pequeños placeres que disfrutaban, por la nueva camisa de uno, el sombrero de la esposa de otro, una salida familiar, o la pintura de la casa, porque todo eso nos era quitado a nosotros, era pagado con nuestras privaciones, nuestras renuncias y nuestro hambre. Empezamos a espiarnos unos a otros, con la esperanza de sorprendernos en alguna mentira acerca de nuestras necesidades y disminuir las asignaciones en la próxima reunión. Y empezamos a servirnos de espías, que informaban acerca de los demás, revelando, por ejemplo, si alguien había comido pavo el domingo, posiblemente pagado con el producto de apuestas. Empezamos a meternos en las vidas ajenas, provocamos peleas familiares para lograr la expulsión de algún intruso. Cada vez que veíamos a alguno saliendo en serio con una chica, le hacíamos la vida imposible, y así arruinamos numerosos compromisos matrimoniales, porque no queríamos que nadie se casara, no queríamos más gente a la que alimentar.

"En los viejos tiempos, el nacimiento de un niño era celebrado con entusiasmo y generalmente ayudábamos a las familias a pagar sus facturas de la clínica si estaban apretadas. Pero luego, cuando nacía un niño, estábamos varias semanas sin dirigirle la palabra a sus padres. Para nosotros, los niños eran como las langostas para los agricultores. En otras épocas ayudábamos a quien tuviera enfermos en su casa, pero luego... Voy a contarle un solo caso. Se trataba de la madre de un hombre que llevaba con nosotros quince años. Era una anciana afable, alegre e inteligente, que nos llamaba por nuestros nombres de pila, y con la que todos solíamos simpatizar. Un día se cayó por la escalera del sótano, y se fracturó la cadera. Sabíamos lo que eso significaba, a su edad, y el médico dijo que tenía que ser internada en un hospital de la ciudad para someterla a un tratamiento costoso y prolongado. La anciana murió la noche antes de ser traslada a la ciudad para su internación. Nunca se pudo establecer la causa de su fallecimiento. No sé si fue asesinada, nadie lo dijo, nadie hablaba del tema. Todo cuanto sé es que... y esto es lo que no puedo olvidar... es que yo también deseé que muriera. ¡Que Dios nos perdone! Tal era la hermandad, la seguridad, la abundancia que se suponía que el famoso plan nos iba a brindar.

...... . Al observar aquello, comprendíamos el motivo real de quienes fueran capaces de apreciar la consigna: ‘De cada cual según su capacidad; a cada cual según sus necesidades’.

"Allí residía el secreto de todo. Al principio no dejaba de preguntarme cómo era posible que hombres educados, justos y famosos, pudieran cometer un error semejante y presentar como buena tal abominación, cuando cinco minutos de reflexión les hubieran indicado lo que sucedería en caso de que alguien pusiera en práctica semejante idea. Ahora comprendo que no obraron así por error, porque errores de este tamaño no se cometen nunca inocentemente. Cuando alguien se hunde en alguna forma de locura, imposible de llevar a la práctica con buenos resultados, sin que exista, además, razón que la explique, es porque tiene motivos que no quiere revelar. Y nosotros no éramos tampoco tan inocentes cuando votamos a favor del plan, en la primera reunión. No lo hicimos sólo porque creyéramos que la vieja y empalagosa farsa que nos presentaban fuera buena. Teníamos otro motivo, pero la farsa nos ayudó a ocultarlo de nuestros vecinos y de nosotros mismos. La farsa nos daba una posibilidad de hacer pasar como virtud algo de lo que nos hubiéramos avergonzado. Ninguno votó sin pensar que dentro de una organización de tal clase participaría en los beneficios de quienes eran más hábiles que él. Nadie se consideró lo bastante rico y listo para no creer que alguien lo sobrepasaría, y este plan lo participaría de la riqueza y la inteligencia ajenas. Pero pensando conseguir beneficios de quienes estaban por encima, olvidamos que había seres inferiores, que buscaban lo mismo de nosotros, olvidamos a los inferiores que tratarían de explotarnos del mismo modo que cada uno intentaría explotar a sus superiores. El obrero impulsado por la idea de que sus necesidades le daban derecho a un automóvil como el de su jefe, olvidó que todo pordiosero y vagabundo de la tierra empezaría a exigir un refrigerador como el del obrero. Ése fue nuestro motivo real cuando votamos. Tal es la verdad pero no nos gustaba reconocerlo y cuanto más lo lamentábamos, más alto gritábamos nuestro amor hacia el bien común.

"Conseguimos lo que nos habíamos propuesto, pero cuando nos dimos cuenta de lo que aquello representaba, ya era demasiado tarde. Estábamos atrapados, sin lugar adónde huir. Los mejores de entre nosotros abandonaron la fábrica en la primera semana del plan. Así perdimos a los mejores ingenieros, supervisores, capataces y obreros especializados. Todo el que se respete no quiere verse convertido en vaca lechera de la comunidad. Algunos intentaron impedir el proyecto, pero no lo consiguieron. Los hombres huían de la fábrica como de una zona infectada, hasta que no quedaron más que los necesitados, sin habilidad ni condiciones.

Ayn Rand: 50 años despues de la Rebelión de Atlas

"La racionalidad es el reconocimiento de que la existencia es un hecho en sí, que nada puede alterar la verdad y que nada puede prevalecer sobre el hecho de comprenderla, que es en lo que consiste el pensamiento."

"El único propósito del gobierno es proteger los derechos del hombre, es decir, protegerlo de la violencia física. Un auténtico gobierno no es más que un policía, que actúa en nombre del derecho a la autodefensa del ser humano y, como tal, sólo puede recurrir a la violencia contra aquellos que han hecho uso de ella."

La rebelión de Atlas

"El socialismo es la doctrina según la cual el hombre no tiene derecho a vivir por su propio bien, que su vida y su trabajo no le pertenecen a él, sino a la sociedad, que la única justificación de su existencia es el servicio a la sociedad, y que la sociedad puede disponer de él según le plazca, con tal de conseguir su propio bienestar colectivo, tribal."

The New Intellectual

"No hay diferencia entre comunismo y socialismo, salvo en los medios para conseguir un mismo objetivo final: el comunismo se propone esclavizar a los hombres por la fuerza; el socialismo, por el voto. Es la misma diferencia que existe entre el asesinato y el suicidio."

Foreign Policy Drains U.S. of Main Weapons

"El país que ha alcanzado los mayores logros, la mayor prosperidad, la mayor libertad, se construyó sobre el derecho del hombre a perseguir su felicidad. Su propia felicidad, no la de los demás."

El manantial

La ley del miedo

Hay quienes ante la falta de recursos racionales optan por la vía fácil del miedo. Puedes pensar como ellos o simplemente ser acusado de reaccionario, facha, expplotador y mil y un epítetos del manual del izquierdista iluminado.
¿En cabeza de quien cabe pensar que por ensalzar una bandera, una idea de nación, por llamar a lucir las banderas en el día de España, habrá quien se asuste, quien tema.... no se qué.?
Los socialistas se sentirían perdidos sin una derecha a quien achacar una y otra vez sus cada vez más grotescos errores. Viven en un pasado de rencores y odios que no conducen a ninguna parte. Sus dirigentes parecen mas preocupados por la consecución de los votos que por administrar sabiamente los recursos de la nación y lograr una mejor calidad de vida para todos los ciudadanos, repito, todos los ciudadanos.
El gobierno dice que por haber superhabit de dinero, producto de la recaudación de Hacienda, se puede permitir regalarlo. Pero vamos, quién les autorizó a regalar mi dinero?. Si sobra devuélvamelo que ya yo sabré como invertirlo de la mejor manera, que de seguro no será creando más burocracia.
Me asusta sobremanera un equipo de gobierno para el que un día el concepto de nación es algo discutido y discutible y al siguiente es algo sagrado e invulnerable.
Me asusta un equipo de gobierno para quien los símbolos de su país no son dignos de ser defendidos y a los que la ley no siempre les parece aplicable, máxime si se trata de obligar a cumplirla a las minorías nacionalistas en las que basan, actualemnte, su cuota de poder.
Me asusta un equipo de gobierno que, pese al tener pruebas evidentes del fracaso de las conversaciones con ETA desde las primeras semanas se empeñan en llevar adelante dichas negociaciones contra viento y marea.
Me asusta un equipo de gobierno que trata de amedrentar a sus votantes con miedos pasados de moda para poder perpetuarse en el poder.
Miedo a qué?
Miedo a la libertad de elegir? Miedo a ser libres? Miedo a que los votantes entiendan finalmente que a más gobierno menos bienestar !!!!